sábado, 12 de mayo de 2012

No está sola ¡Apúntate!


Amores se pueden tener de todas clases. Los hay pasionales, serenos irracionales y sensatos.. y también platónicos. Estos últimos son estupendos pues solamente necesitan el tiempo que tú, en verdad, quieras darles… y siempre, siempre será sincero y gratificante. Yo os confieso que he tenido varios de éstos que han ocupado mis ansias amorosas. Alguno, como el de la Sra. Manjón, me salió rana. Desde entonces dos enormes grapas se encargan de que no se parta cuando la veo en televisión haciendo más de política de lo que yo esperaba.

Decía Manuel Machado que “¡Mujeres tengo dos: una que me quiere a mi.. y otra a la que quiero yo!”. En esa parquedad en los quereres no comulgo con él y eso que seguramente compartimos genes, pues tanta similitud de ideas en vivir la vida no puede ser fruto de la casualidad. Yo amores intangibles tengo muchos.

Os hablaré de mi último y platónico amor. Del que provoca mis suspiros en las noches de luna llena en la que es muy hermoso pensar que el mundo es ese lugar maravilloso y habitable en el que un día se podrá ser completamente feliz. “Ella” es una mujer de belleza serena … y estilizada figura. Arremete también contra los molinos que agitan las aspas de la corrupción. No se ríe nunca y es que aparte de que no tiene motivo, la cosa no está para risas; en su lugar hace falta gente seria ¡Exigimos gente seria! Arrastra una maleta llena de archivos y documentos varios.. que mueve con soltura a pesar de su, aparente, fragilidad. Atraviesa la fila de miradas que expectantes, la atraviesan de arriba abajo. Unas curiosas, otras furiosas y al menos una, la mía, mimosa en extremo. Decía Antonio Burgos, con su maestría habitual, que no tenía un Cirineo que le ayudara a llevar la carga sobre dos ruedas y encima de los hombros tendrá que soportar. Viste bien, pero sin alharacas.. es elegante ¡pero discreta! ¡Seria, pero no antipática! Mantiene la mirada al frente pero sin orgullo y es la destinada a vengarnos de tanto chorizo, tanta corrupción e ineptitud que nos ha dejado con una mano delante y otra detrás.

Yo voy siempre detrás de ella.. en mi pensamientos, apartando los obstáculos que puedan molestarla.. guardando las espaldas de los furibundos ataques que sé le esperan, cuidando de ella con mimo y celo escrupuloso hasta la saciedad.
Sin darme cuenta….. tarareo una canción que oía en la niñez a Adamo y que decía algo así como: Ay!! Amor.. que pueden sorprenderte.. y alguien más se puede enamorar.


En Facebook tiene un club de fans y yo, su seguro admirador, os pido que la apoyéis: Todos con la Jueza Mercedes Alaya.


-Elegante-



Clica aquí: Jueza Mercedes Alaya






1 comentario:

  1. Ele, ¿por qué no creas un grupo en el maldito e imprescindible Face Book?
    ¡Anda, decídete!
    Simplona

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